Al acudir a una entrevista de trabajo, se debe cuidar al máximo la imagen personal, escoger un atuendo impecable para el cuerpo y un maquillaje sutil que muestre un rostro positivo.
Es bien cierto que la primera impresión es la que suele contar, por
eso el maquillaje te puede ayudará y mucho al presentarte a una
entrevista de trabajo. Aquí la regla básica es ser discreta.
Para ello
es ideal tomar una base de maquillaje de textura fluida y unos pocos
polvos para aplicar en la mejilla. Recuerda que se trata de mostrar una
imagen sobria, no de llamar la atención con colores demasiado
llamativos.
La definición de los labios debe realizarse con un lápiz labial de
tono anaranjado, para pieles más bien oscuras y un tono rosáceo para
pieles más claras. La mirada también es muy importante, aporta
expresividad alargando las pestañas y trazando una ligera y fina línea
realizada con el delineador.
Recuerda que en ningún momento hay que mostrar una imagen demasiado
provocativa, ni llamativa, sino sutil, formal y sobria, siempre
mostrando una imagen impecable, la mejor manera de que nuestra
candidatura se mantenga firme y con opciones.
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